Periodo Prehispánico en Bolivia
En Bolivia se han hallado evidencias de ocupación humana desde el 12 000-10 000 a.C. en el yacimiento de Viscachani.15 Hasta el 1200 a.C. se desarrollan unas culturas sedentarias en el altiplano. A partir de esta fecha, las culturas Chiripa y Wankarani son las dos más importantes del periodo formativo.
Para comprender el desarrollo del período prehispánico en Bolivia debemos considera dos zonas: la altiplanicie, situada entre los dos brazos de la cordillera, y las tierras bajas. El primer sector, que abarca el occidente de lo que hoy es Bolivia, se halla relacionado con las culturas de la sierra en el Perú, y las de la costa, Más el norte de Chile. Existe una secuencia que culmina con la aparición de Tihuanaco, la formación de los señoríos aimaras y la dominación incaica. Las tierra bajas tienen un desarrollo diferente, el que puede ejemplificarse con los extensos conjuntos arqueológicos en el Beni; y también con las culturas de Santa Cruz, como El Palmar, pero en un momento dado, los pueblos del oriente contactan con los incas a raíz de la invasión guaraní, cuando ya el Imperio Incaico había avanzado hasta las últimas estribaciones de la cordillera.
Los valles centrales muestran un desarrollo cultura muy antiguo, desde la llamada cultura “Sauces”, pasando por los estilos Tupuraya y Mojocoya, hasta los Yamparas. Estas culturas se desarrollan principalmente en los departamentos de Chuquisaca y Cochabamba.
Simultáneamente a estas tres líneas de desarrollo hay pueblos marginales que mantienen un estadio cultural que no acusa cambios, como ocurre con los Urus que mantienen su carácter de pescadores, o los Choquelas que son grupos cazadores mentados por varios de los cronistas, y finalmente, están los Moyos que eran recolectores.